Los desafíos climáticos, cada vez más apremiantes, exigen unión, trabajo conjunto y colaboración. Suponen una urgencia ineludible, donde las alianzas entre actores del sector privado, público y sociedad civil son inevitables para generar y expandir impacto. Por eso, nos complace anunciar nuestra reciente incorporación a la Cámara de Comercio Colombo Chilena, un espacio que abre nuevas posibilidades para fortalecer nuestra misión de promover la acción climática y la sostenibilidad en Latinoamérica. 

Bogotá, Medellín, Cali y otras regiones del país serán sede de distintos talleres que estaremos impartiendo en 2025, en los que compartiremos nuestra experiencia y conocimiento técnico en materias como riesgos y oportunidades que surgen del contexto de crisis climática, planes de transición para el sector financiero, emisiones financiadas y huella de carbono. Sembrar semillas y empoderar a líderes y organizaciones para que ellos lideren, con determinación, sus propios caminos hacia la sostenibilidad, es algo que venimos realizando hace años y que nos entusiasma expandir también a Colombia. 

La semana pasada tuvimos un primer acercamiento al asistir al evento de cierre de año de la Cámara, un espacio diverso donde pudimos conocer a sus integrantes y explorar sinergias con empresas de distintos sectores. El encuentro confirmó algo que ya intuíamos: la Cámara es un motor para construir colaboraciones sólidas y generar transformaciones reales a nivel nacional y regional, y está alineada con algunos de los temas que hemos venido trabajando con fuerza en el último tiempo, incluyendo finanzas sostenibles y aquellos vinculados a energía limpia. 

Ser parte de la Cámara no solo refuerza nuestra conexión con Colombia, donde este 2024 abrimos nueva oficina, sino que también revitaliza y da un nuevo impulso a nuestro compromiso en esta parte del mundo, donde continuamos viendo oportunidades crecientes y valiosas para fortalecer nuestro rol como aliados estratégicos de confianza en la lucha contra el cambio climático.